La huelga está dirigida "contra el aumento de los precios por parte de las compañías petroleras" y promueve "una verdadera reforma del sector" de la distribución de gasolina, precisó la FAIB en su cuenta de Twitter.
Según declaró la Federación Italiana de los Gestores de Instalaciones de Carburante (Figisc), por sus siglas en italiano), que participa en la huelga, en su página web oficial, los gestores de las gasolineras protestan "contra la política fiscal del Gobierno y contra la negación a los derechos de un sector que ya se encuentra al límite".
Además del cierre de las gasolineras, está prevista una manifestación en la plaza del Parlamento en Roma.
Los gestores de las gasolineras muestran de esta manera su desacuerdo con algunas medidas que el Ejecutivo ya introdujo o piensa introducir, como la facturación electrónica o las cajas registradoras telemáticas.
La gasolina en Italia es la más cara en la UE, a causa de los numerosos impuestos que componen casi dos tercios del precio al consumidor.
Entre los 18 impuestos que gravan el precio de la gasolina, el más importante es el IVA, pero hay otros que son bastante exóticos, como el impuesto que cubre los gastos de la guerra contra Etiopía, que Italia condujo en 1935-1936, o la tasa destinada a financiar los gastos incurridos durante la crisis de Suez en 1956.