Según la agencia, las pruebas se llevaron a cabo para "verificación definitiva" de la eficacia del sistema.
Los lanzamientos se realizaron bajo la jefatura del líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, quien expresó su "gran satisfacción" con el resultado.
El Ministerio de Defensa surcoreano informó previamente que Corea del Norte disparó dos misiles balísticos hacia el mar del Este (mar de Japón) desde la provincia de Hamgyong del Sur.
Según los datos del Estado Mayor Conjunto surcoreano, los proyectiles fueron disparados presuntamente de "un lanzacohetes múltiple de gran calibre".
Lanzados con un intervalo de 30 segundos, ambos recorrieron unos 380 kilómetros, al alcanzar una altura máxima de 97 kilómetros.