Según el comunicado oficial, "tan sólo un caso en el estado de São Paulo (sureste) sigue como sospechoso".
Desde el inicio de la crisis del coronavirus otros 50 casos fueron descartados, y el país sigue sin ninguna infección confirmada de la enfermedad.
Al margen de este caso en estudio, las autoridades sanitarias también están pendientes del grupo que el 9 de febrero llegó a Brasil repatriado procedente de Wuhan (China, sureste), la ciudad donde se originó el brote.
Las 58 personas se encuentran en buen estado de salud y sin síntomas, aunque por precaución deberán permanecer 18 días en cuarentena en la base militar de Anápolis (estado de Goiás, centro de Brasil).