"Si los países adoptan tecnología poco fiable para desarrollar su red pondrán en peligro la capacidad de cooperación", dijo Robert Strayer, secretario de Estado adjunto de EEUU y responsable de política de información y comunicaciones cibernéticas e internacionales.
Strayer pronunció estas palabras durante un acto en la Embajada estadounidense en Madrid, donde defendió que España —así como el conjunto de la Unión Europea— debería excluir a las empresas chinas y recurrir a corporaciones de "confianza" como Ericsson, Nokia o Samsung.
A su modo de ver, el hecho de que empresas chinas puedan desarrollar redes 5G de países aliados de EEUU pondrá en riesgo la cooperación en materia de inteligencia porque el país asiático "no tiene un sistema judicial independiente", lo que hace que cualquier información importante se encuentre "en riesgo de ser accedida por el Partido Comunista chino".
Estas palabras de Strayer se enmarcan dentro de una gira que el representante estadounidense se encuentra realizando en suelo europeo tras participar en la conferencia de Munich.