El campamento base Artemis constará de tres elementos principales: un vehículo lunar tripulado para transportar astronautas a distancias cortas, una plataforma de vida móvil para viajar hasta 45 días y un módulo básico tripulado que puede alojar a cuatro personas.
Además, la base estará equipada con infraestructura para el suministro de energía autónoma, la comunicación con la Tierra, la protección contra las radiaciones, el lugar de aterrizaje y un contenedor para el reciclaje de los desechos radiactivos.
"El campamento base Artemis será nuestro primer punto de apoyo en la superficie lunar", indica el informe de la NASA.
La misión Artemis utilizará la Luna como un trampolín, permitiendo a la tripulación probar robots y otras tecnologías antes de explorar más lejos en el sistema solar.
Los astronautas que participarán en la misión Artemis utilizarán su estancia en la Luna para preparar su viaje a Marte.
Estarán probando una gama de nuevas tecnologías para incluir la mitigación del polvo lunar, permitiendo operaciones en ambientes extremos y la producción de combustible, agua y oxígeno.
La NASA espera que el equipo desarrolle con éxito una colección solar avanzada y un pequeño y ligero sistema de energía de fisión para apoyar misiones y operaciones de mayor duración en la Luna, y eventualmente para Marte y más allá.
El último alunizaje tripulado ocurrió en 1972, como parte de la misión estadounidense Apolo 17. Solo seis veces han caminado los astronautas por la Luna, todas las incursiones llevadas a cabo por la NASA como parte de su programa Apolo. La misión Artemis se basará en estos esfuerzos pasados y se espera que lleve la exploración lunar a nuevas alturas.