"Se debe exigir de los dirigentes de las grandes redes sociales y de los nuevos medios que publiquen unos 'stop list' concretos, para que los usuarios sepan la utilización de qué palabras supone el 'cierre' o la 'eliminación'. Queremos que se ponga fin a la censura e insistimos en que en las redes sociales rijan unas reglas transparentes", dijo en una reunión de la OSCE del tema de La lucha contra todas las formas de la intolerancia y la discriminación.
Los propietarios de las grandes redes sociales inicialmente posicionaban sus plataformas como un espacio libre de censura política, pero últimamente tienden a aplicar una política represiva con respecto a los usuarios que se pronuncian en apoyo a determinadas concepciones políticas y a las personas que las expresan, constató Malkévich y agregó que suscita numerosas interrogantes la actividad de Facebook, Twitter, Google y YouTube, que usan ampliamente la práctica de bloqueo.