"No se trata de un solo episodio, sino de un trabajo sistemático y serio que se realiza por nuestros 'socios occidentales'", dijo el experto durante una rueda de prensa realizada por el grupo mediático Rossiya Segodnya, casa de matriz de Sputnik.
Subrayó que "de hecho, se trata de una guerra tan discreta, una contienda informativa contra Rusia con muchos efectos multiplicativos, que se logran con métodos de lo más diversos. Desafortunadamente, recientemente estos métodos no parecen ser legales".
El experto agregó que anteriormente los objetivos de tal guerra de información eran Irán y Corea del Norte, y ahora son países tan grandes como Rusia y China.
"Desafortunadamente, esta guerra discreta se está volviendo más visible y sus componentes son ahora modelos bastante serios de comportamiento y estereotipos conductuales que son característicos no solo de la clase política occidental, sino se están extendiendo entre la población de distintos países, incluida Rusia, lo que causa una disonancia muy grave en las relaciones internacionales", puntualizó el experto.