Un avión de patrulla marítima P-8A, denominado Poseidón, de la Armada de EEUU, un avión de reconocimiento RC-135 y un avión cisterna KC-135 de la Fuerza Aérea de EEUU fueron escoltados todo el tiempo por los controles de radar rusos y el Su-30.
Según describe el Ministerio de Defensa ruso, la tripulación del Su-30 se acercó a los aviones estadounidenses a una distancia segura pero no lejana.
Los aviones estadounidenses al percatarse de que estaban siendo escoltados cambiaron inmediatamente la dirección de vuelo.
El vuelo del Su-30 cumplió con las normas internacionales de espacio aéreo. Una vez completada la misión, el caza ruso regresó a salvo a su aeródromo.