Los perros tienen un olfato 1.000 veces más agudo que los humanos, si se los entrena, pueden detectar drogas, bombas y el COVID-19. Así lo demostró un proyecto piloto de las Fuerzas Armadas alemanas, la Universidad de Medicina Veterinaria de Hannover y el Centro Médico Universitario de Hamburgo-Eppendorf, Alemania.
Las muestras se distribuyeron automáticamente al azar y ni los adiestradores de perros implicados ni los investigadores in situ sabían qué muestras eran positivas y cuáles se utilizaban para fines de control.
Los perros fueron capaces de distinguir entre las 1.012 muestras de individuos infectados (positivos) y no infectados (negativos) con una sensibilidad media del 83% y una especificidad del 96%. Según se explica en el estudio, la sensibilidad se refiere a la detección de muestras positivas. La especificidad designa la detección de muestras de control negativas. La tasa de detección media general fue 94%.
"Creemos que esto funciona porque los procesos metabólicos en el cuerpo de un paciente enfermo cambian completamente", dijo Maren von Koeckritz-Blickwede, profesora de la universidad, en un video de YouTube sobre el proyecto. "Creemos que los perros son capaces de detectar un olor específico".