"El primer ministro de la República de Bielorrusia se inyectó la vacuna después de las negociaciones con su par ruso [Mijaíl Mishustin] que se celebraron en Minsk el 3 de septiembre. Se siente perfectamente bien, fue al trabajo el viernes, el sábado y hoy [el 7 septiembre]", dijo a Sputnik.
El pasado 11 de agosto, Rusia registró oficialmente su vacuna contra el COVID-19. Se trata de una autorización especial: la vacuna se puede administrar solo a personas de grupos de riesgo y bajo un control estricto.
Sputnik V, según el nombre comercial de la vacuna, genera inmunidad hasta por dos años. El fármaco ya pasó dos etapas de ensayos.
El ministro de Salud ruso, Mijaíl Murashko, anunció que la vacunación de los voluntarios en el marco de la tercera etapa de pruebas clínicas arranca esta semana.