De acuerdo con el ministro de Defensa del país, Carlos Holmes Trujillo, el balance de los dos días de manifestaciones deja 209 civiles y 194 policías heridos. Diez ciudadanos han muerto en el marco de las protestas, siete de ellos en Bogotá y tres en Soacha.
En total, más de 90 vehículos han sido afectados, entre los cuales se encuentran decenas de buses incendiados y vehículos institucionales vandalizados.
Diversas imágenes compartidas en las redes sociales los últimos dos días muestran violentos enfrentamientos entre agentes del orden y manifestantes.
Las manifestaciones contra la brutalidad policial en Colombia se iniciaron después de que Javier Ordóñez, un abogado de 46 años y padre de dos hijos, fuera inmovilizado en un procedimiento policial y recibiera varias descargas eléctricas con una táser —una pistola eléctrica—.
Ordóñez, quien según medios locales, había sido detenido por consumir alcohol en la vía pública, les rogó a los policías que se detuvieran. Algunos vecinos incluso trataron de intervenir, pero los dos agentes continuaron con las descargas eléctricas. El abogado falleció en el hospital.