La decisión fue tomada después de que un grupo de ocho mujeres clausurara de forma simbólica el edificio. Las manifestantes colocaron pancartas, acordonaron la puerta principal de la sede de Morena y no permitieron la entrada ni salida de personas a la que fue casa de campaña del presidente Andrés Manuel López Obrador en 2018. Además las mujeres denunciaron los supuestos acosos por parte del político.
Ante esta situación, Muñoz Ledo pidió a la militancia de Morena a través de las redes sociales pronunciarse a favor de la legalidad y la concordia por todos los medios a su alcance.
"Hoy a las 12:00hrs iba a rendir protesta como presidente legítimo del partido. Sucede que fue tomada la sede del mismo en un asalto violento provocado por el candidato al que derroté [Mario Delgado]. Demando el cese de hostilidades y la inversión multimillonaria en la vida del partido", escribió.
Al sitio también acudieron simpatizantes de Porfirio Muñoz Ledo quienes se enfrentaron con las mujeres y exigieron pruebas de las acusaciones de acoso sexual.
El 11 de octubre el diputado y aspirante a la presidencia nacional del partido Morena aseguró que tomará posesión del cargo, a pesar de que el Instituto Nacional Electoral (INE) determinó la necesidad de una nueva encuesta, tras decretar un empate técnico entre él y Mario Delgado.
Al respecto, el INE explicó que este proceso tiene como base un ejercicio estadístico que calcula los porcentajes de preferencia, mas no el número de votos a favor de un candidato. Por ello, consideró que, estadísticamente, no se puede determinar un ganador y se requiere una nueva encuesta entre Muñoz Ledo y Delgado para definir la elección de un dirigente nacional para Morena.