"Argentina enfrenta cambios dramáticos; el país está en un punto en que la prioridad debería ser llevar a cabo una agenda económica integral y fiable, que logre un balance entre apoyar a la economía y a la gente en este momento de dificultades con la certeza de tener estabilidad macroeconómica", expresó.
Las autoridades de la nación deberían presentar a la comunidad internacional un mapa de ruta para entender en qué dirección se están moviendo y cómo harán para alcanzar sus objetivos, agregó.
El FMI quiere ser socio de Argentina, por lo que su misión retornará a Buenos Aires en noviembre, dijo Georgieva.
En agosto, las autoridades argentinas acordaron reestructurar la deuda con sus acreedores privados por 65.000 millones de dólares, lo que permitió al país una salida formal de su noveno default.
La expectativa es que el Producto Interno Bruto (PIB) de Argentina caiga 11,8% en 2020 debido al impacto de la pandemia de COVID-19.