"El ataque de Rusia a un campamento de la oposición ubicado en las proximidades de Idlib demuestra que no tiene ganas de paz y tranquilidad estable allí", dijo Erdogan en su discurso ante el gobernante Partido de la Justicia y el Desarrollo.
El diario sirio Al Watan informó la víspera citando a fuentes en el Ministerio de Sanidad en Idlib que más de 40 combatientes murieron y otros más de 60 resultaron heridos en un ataque aéreo de la Fuerza Aeroespacial rusa contra un campo de entrenamiento de radicales del grupo Faylaq al Sham en la provincia siria de Idlib, el último bastión del yihadismo en el país árabe.
"Recientemente fueron neutralizados unos terroristas que planificaban atentados en nuestro territorio", declaró el líder turco, "si los terroristas no se alejan de nuestras fronteras, pasaremos a acciones".
También aseguró que las fuerzas turcas son capaces de "limpiar Siria de todas las organizaciones terroristas".
Entre 2016 y 2019 Turquía llevó a cabo tres operaciones militares en Siria.
En octubre de 2019, Turquía lanzó la operación Fuente de Paz en el noreste de Siria con el argumento de alejar a las milicias kurdas de su frontera y delimitar una "zona segura" para acoger a los miles de refugiados sirios que permanecen en su territorio.
La ofensiva apunta contra las formaciones lideradas por los kurdos, entre ellas las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), las milicias del Partido de la Unión Democrática (PYD) y las YPG, que controlan el noreste sirio y a las que Turquía vincula con el PKK.
En todas las ocasiones Damasco se expresó en contra de la presencia militar turca en Siria, que calificó de "ilegítima".