"El día de ayer [el 27 de octubre] fue atacada con un arma larga poderosa que estamos en investigación para determinar qué tipo de arma, la refinería de Amuay, una de las más importantes refinerías de Venezuela y de América Latina, quisieron provocar una explosión total de la refinería de Amuay", expresó Maduro durante una rueda de prensa en el Palacio de Miraflores (sede de Gobierno).
El mandatario detalló que en el ataque derribaron una torre con un nivel de espesor superior a un tanque de guerra.
Maduro giró instrucciones a su equipo de Gobierno a mostrar las pruebas del ataque terrorista contra la refinería de Amuay.
"Venezuela está enfrentando situaciones de complot permanente contra nuestra vida, contra nuestra industria estratégica, contra el servicio eléctrico, la industria petrolera, contra los servicios públicos", indicó.
El presidente responsabilizó al Gobierno de Estados Unidos de estar detrás de las conspiraciones contra Venezuela, en complicidad con Europa y otros países.
El pasado mes de septiembre, el Gobierno venezolano también denunció planes conspirativos contra instalaciones petroleras, sucesos por los cuales fueron detenidos e imputados dos ciudadanos estadounidenses.