"Rusia apoyó y ayudó a este acuerdo. Por supuesto, la participación positiva de Rusia en cualquier acuerdo sobre Libia es un elemento importante para su éxito", dijo Mitig en una entrevista con Sputnik.
El vice primer ministro señaló que gracias a la reanudación del sector petrolero, Libia produce más de 1,2 millones de barriles de petróleo diariamente, lo que brinda la esperanza de que la economía libia pueda estabilizarse en un futuro próximo.
Por su parte, Moscú se manifiesta a favor de prestar el apoyo máximo a Libia, declaró el ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, reunido en Moscú con su homólogo del Gobierno del Acuerdo Nacional de Libia, Mohamed Syala.
"Rusia está interesada sinceramente en contribuir al máximo a la solución de los problemas de su país. En esta reunión debatiremos los esfuerzos que desarrolla la comunidad internacional en apoyo a los libios. Nos importa saber la opinión de la parte libia sobre los pasos que se debe dar adicionalmente", dijo el canciller ruso al comienzo de las negociaciones.
Lavrov subrayó que esta reunión se celebra en un momento decisivo para la suerte de Libia.
"El amistoso pueblo libio está sufriendo las consecuencias de la agresión de la OTAN y de la guerra civil que estalló luego. Hoy día se debe hacer una histórica elección entre la continuación de la guerra fratricida y la reconciliación nacional y la edificación conjunta de un Estado estable y próspero", indicó.
El comandante del Ejército Nacional Libio (ENL), el mariscal Jalifa Haftar, anunció el pasado 18 de septiembre la reanudación de la extracción y las exportaciones del petróleo de los puertos libios, cerrados desde enero por los combates.
En Libia continúa el enfrentamiento entre el Gobierno de Acuerdo Nacional (GAN), encabezado por Fayez Sarraj, que controla Trípoli y unos territorios en el oeste del país, y el Ejército Nacional Libio (ENL), al mando de Haftar, que coopera con el Parlamento que sesiona en el este de Libia.
El GAN goza de apoyo por parte de Turquía y Catar, mientras al ENL lo apoyan Egipto y los Emiratos Árabes Unidos.