Este pit bull, de nombre Rheya, consiguió un inesperado juguete. Sin embargo, no esperaba lo que pasaría un poco más tarde. Tras hacer agujeros en su batería mientras jugaba provocó un pequeño incendio.
El pit bull y su compañero se asustaron un montón y abandonaron corriendo el lugar del accidente.
Este pequeño incendio se apagó, pero dejó una enorme quemadura en la alfombra, de acuerdo con la dueña de los canes.
Afortunadamente, ningún perro resultó herido en este incidente.