El 15 de enero el Departamento del Tesoro de EEUU anunció sanciones contra tres funcionarios chinos y tres funcionarios de Hong Kong, en relación a la represión contra los manifestantes en esa región administrativa especial el pasado 6 de este mes.
"El Gobierno de Hong Kong condenó en términos enérgicos las 'medidas coercitivas' tomadas por del Departamento de Estado de EEUU ... respecto a seis funcionarios del Gobierno central chino y del Gobierno de Hong Kong", dice el comunicado.
Aseguró que el Gobierno central puede contar con el apoyo del Gobierno hongkonés a la hora de tomar medidas de respuesta a las acciones de Washington.
El de 6 enero, la Policía de Hong Kong realizó varios allanamientos en los que detuvo a unos 50 reconocidos activistas y políticos que se oponen a Pekín, incluyendo un ciudadano estadounidense.
Pekín manifestó su apoyo a la Policía de Hong Kong y criticó a Washington por considerar que tiene diferentes criterios en cómo fueron percibidos los disturbios en ese territorio, y en el Capitolio, sede del congreso estadounidense.