Austin obtuvo el apoyo de una abrumadora mayoría de legisladores, con 93 votando a favor de su confirmación y solo dos en contra.
El 21 de enero, tanto la Cámara de Representantes como el Senado aprobaron con las mayorías requeridas, una legislación de exención que exceptuó a Austin de la prohibición del Congreso de que un exoficial militar sirva como secretario de defensa durante al menos siete años después de su jubilación.
Austin, un general de cuatro estrellas, se retiró en 2016 y es el primer afroamericano en servir como secretario de Defensa.