La policía utilizó gas lacrimógeno y cañones de agua para dispersar a los manifestantes que protestaban en contra del asesinato de Francisco Martínez en Santiago.
Ante la presión de las protestas, los manifestantes quemaron neumáticos y madera en medio de las calles y lanzaron piedras contra los vehículos policiales.
Un escenario similar se registró en la ciudad de Valparaíso.
En la noche del 8 de febrero fueron detenidas 16 personas en Chile en el marco de una nueva jornada de manifestaciones por la muerte de un malabarista a manos de la Policía, informó Carabineros (Policía militarizada).
"Un total de 12 personas fueron detenidas en la ciudad de Villarica [sur] durante la noche por protestas en la Municipalidad, y 11 fueron aprendidos en Santiago, en las inmediaciones de la Plaza Italia", informó la Policía a radio Biobío.
En Villarica se produjo la situación más grave, debido a que los manifestantes lanzaron objetos incendiarios contra el edificio del municipio, que resultó con serios daños debido a varios focos de incendio en algunas de sus dependencias.
Carabineros explicó que tienen material audiovisual para entregar a la Fiscalía que demuestra que al menos uno de los 12 detenidos fue partícipe del lanzamiento de bombas molotov.
6 de febrero 2021, 16:44 GMT
Los manifestantes en el centro de Santiago fueron reprimidos por Carabineros con bombas lacrimógenas y carros lanzaguas, y cinco personas fueron detenidas bajo el cargo de desorden público.
Francisco Martínez fue asesinado el 5 de febrero cuando Juan Gonzáles Iturriaga y otros dos agentes realizaban una ronda en la localidad de Panguipulli y decidieron revisar la identidad del malabarista, que se encontraba en una esquina ofreciendo un espectáculo.
Según el carabinero, el artista no llevaba consigo documentos y se negó a acudir a la Comisaría como se lo habían pedido. Vertió amenazas de muerte con los cuchillos de malabarismo que portaba y Gonzales realizó seis disparos, que causaron la muerte de Martínez.
Por el momento, la justicia chilena ha ordenado el arresto domiciliario del carabinero que disparó a Francisco Martínez mientras dure la investigación.