En un comunicado, el ayuntamiento de Río de Janeiro informó que se espera que la paralización dure casi una semana, hasta el martes 23 de febrero, "hasta que la ciudad reciba del gobierno federal una nueva remesa de dosis del inmunizante".
En la ciudad de Río de Janeiro ya se vacunó con la primera dosis a más de 280.000 personas, y este miércoles debería haber empezado a inocularse a los residentes de 83 años; cada día de la semana corresponde a una edad.
Se dejará de inmunizar a nuevas personas, pero sí se dará la segunda dosis a los grupos prioritarios que empezaron a ser vacunados a mediados de enero.
Las autoridades sanitarias ya habían reservado esa segunda vacuna en previsión de que pudieran faltar.
Salvador y Cuiabá dejaron de vacunar el martes; Porto Alegre (sur) suspenderá la campaña este jueves, y al día siguiente lo hará Curitiba (sur).
Las autoridades sanitarias de Florianópolis (sur) y Fortaleza (noreste) también alertaron de que sus vacunas se están acabando y que deberán parar en los próximos días.
El gobierno del estado de São Paulo, al que está vinculado el Instituto Butantan (fabricante en Brasil de la vacuna del laboratorio chino Sinovac) informó que el próximo 23 de febrero entregará al gobierno federal 426.000 vacunas.
Esa será una primera remesa; se espera que en los siete días posteriores se llegue a un total de 3,4 millones, lo que permitiría retomar momentáneamente la campaña de vacunación en el país.