Sin embargo, cuando cumplió cinco años, ya podía sorprender a sus amigos poniéndose la pierna sobre el cuello.
"No me duele. No siento nada más que sensaciones agradables", declaró el joven que hasta el día de hoy sigue desarrollando su talento.
Ahora, puede hacer muchos movimientos diferentes e incluso ha inventado sus propios trucos. Azamat incluso es capaz de tocar su instrumento favorito, la domra, mientras pone las piernas sobre los hombros.
Azamat sueña con muchas cosas, la primera es romper el Libro Guinness de los Récords en la categoría de flexibilidad, mientras que su segundo meta es convertirse en un músico de domra de alto nivel.