"Necesitamos que nos ayuden con voluntarios, necesitamos ayuda, porque estamos en guerra", dijo en rueda de prensa este 5 de marzo el secretario de Salud del gobierno de Sao Paulo, Jean Gorinchteyn, dirigiéndose a los consejos regionales de Medicina, Enfermería y Fisioterapia.
El responsable de la salud pública en Sao Paulo añadió que los hospitales ya se están preparando para habilitar camas en cualquier espacio disponible, incluso en los pasillos, porque aunque no haya habitaciones la prioridad será que no queden pacientes desasistidos.
El gobernador de Sao Paulo, Joao Doria, también dijo en rueda de prensa que el próximo lunes se darán detalles sobre la construcción de un nuevo hospital de campaña en la capital, ya que los que fueron construidos hace un año, al inicio de la pandemia, se desmontados hace meses.
Esta semana, el estado de Sao Paulo batió su récord diario de muertes por COVID-19 (468 fallecidos el 2 de marzo), y tiene el mayor índice de ocupación de Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) desde el inicio de la pandemia (77, 4%).
Ante el repentino aumento de las internaciones en hospitales, el obierno regional endureció las restricciones y desde el sábado 6 de marzo y hasta el 19 de este mes todo el comercio, bares y restaurantes deberán permanecer cerrados.