"El estudio es una evaluación basada en la progresión de voluntarios para monitorear posibles problemas relacionados con la salud como resultado de la recuperación de COVID-19, y el equipo ha reanudado la evaluación de los voluntarios iniciales", dijo el Departamento de Defensa en un comunicado de prensa.
El investigador principal, el comandante de la Armada, Andrew Letizia, dijo que el estudio ampliado ayudará a comprender "cómo el sistema inmunológico de un infante de marina podría combatir las cepas nuevas y emergentes del SARS-CoV-2 (nuevo coronavirus)", así como los efectos a largo plazo de la enfermedad.
El estudio inicial se realizó de mayo a noviembre de 2020, y siguió a los reclutas de la Marina que ingresaron al campo de entrenamiento seis semanas después de la infección, según el comunicado.
El equipo de investigación de la Marina está contactando actualmente a una cohorte dispersa de marines que participaron en el primer estudio para el proyecto de seguimiento llamado Charm 2.0, abreviatura en inglés de COVID-19 respuesta de acción sanitaria para los marines, según el comunicado.