A las 00:08 GMT, el Observatorio Etneo del Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología (INGV) informó acerca de "un desbordamiento de lava desde la zona este del cráter sureste" del volcán, el cual se expande hacia el Valle del Bove.
Cerca de dos horas y media más tarde, el ente informó que la actividad de la fuente de lava en el cráter sureste había terminado. Sin embargo, detalló que se sigue alimentando el flujo de lava que se expande por la vertiente occidental del Valle del Bove.
El INGV informó también que persiste una actividad estromboliana moderada en el volcán. Los vulcanismos estrombolianos se caracterizan por erupciones explosivas, entre las cuales se observan periodos de calma de extensión variable.
El Etna, el volcán más activo de Europa, reanudó su actividad a finales de diciembre de 2020. La actividad estromboliana con alto temblor volcánico se volvió más frecuente a partir del 16 de febrero del año corriente.