Desde el Conred afirman que aunque una de las construcciones afectadas en la ladera oeste del volcán no es habitada, funcionaba como área de monitoreo en una finca cercana al Volcán. Explicó que el flujo de lava avanza entre 50 y 60 metros diarios, razón por la cual vigilan de cerca el fenómeno.
Según informes locales, se detectaron columnas de ceniza y gases hasta una altura de entre 3.000 y 3.500 metros sobre el nivel del mar al tiempo que era visible el flujo de lava sobre los 2.500 metros.