"Sustancialmente, la comisión mixta cumplió su tarea, se revisaron todos los temas de la cooperación bilateral, se ajustaron los planes, se determinaron las prioridades, y se acordó agilizar y desarrollar las relaciones económico-comerciales", expresó Bogatir a esta agencia.
El funcionario ruso subrayó que el año 2020 fue de muy poca actividad en este sentido, teniendo en cuenta las condiciones determinadas por la pandemia del COVID-19.
Enfatizó que la pandemia impuso restricciones para todo el mundo, la economía global se contrajo considerablemente y Cuba y Rusia también sufrieron las consecuencias de estas circunstancias.
Sin embargo, afirmó que Cuba sufrió más porque es una economía más pequeña y "con sanciones unilaterales e ilegales de EEUU".
"El 2020 fue un año excepcional en este sentido para la isla, por la cantidad y severidad de estas sanciones estadounidenses", enfatizó Bogatir.
Según el representante comercial ruso en la Comisión Mixta, que sesionó en La Habana los días 31 de marzo y 1 de abril, ambas partes tuvieron mucho de qué hablar, después de un año del encuentro anterior celebrado en Moscú.
"Eso no quiere decir que los Grupos de Trabajo y los ministerios que integran la comisión hayan dejado de mantener contactos periódicos, pero a consecuencia de la situación internacional y las restricciones sanitarias esos contactos disminuyeron", dijo.
Resultados y perspectivas
Explicó además que ambas partes, encabezadas por los viceprimeros ministros de Cuba, Ricardo Cabrisas, y de Rusia, Yuri Borísov, pasaron revista a todos los aspectos de la cooperación económica-comercial que mantienen ambos países.
"Los planes de cooperación bilaterales son grandes, pero no solo hablamos de los planes, sino de un paquete de proyectos bien avanzados y elaborados que están incluidos en los programas de cooperación", precisó Bogatir.
"Todos los proyectos que hemos elaborado y fijado en nuestros planes bilaterales siguen vigentes; sin embargo, el cronograma de la implementación de los mismos tiene que reajustarse a las realidades económicas actuales", añadió.
De ahí que en esta comisión se pasó revista a los proyectos con prioridad inmediata, mientras otros planes son a mediano y largo plazo, pero todo el paquete de proyectos se mantiene vigente y eso "es muy importante", indicó.
El representante comercial ruso dijo, además, que La Habana y Moscú confirmaron la necesidad de agilizar la cooperación en esferas de la energía, transporte, industria farmacéutica, salud pública, metalurgia, entre ellos la modernización de la planta Antillana de Acero, en La Habana, "que sin duda alguna será finalizado exitosamente".
También estuvo en el centro de las discusiones el tema de la modernización y mantenimiento de los aviones rusos que emplea la compañía aérea Cubana de Aviación.
Otro de los temas en la agenda fue el proyecto petrolero que ejecuta la compañía rusa Zarubezhneft en los yacimientos del bloque ubicado en Boca de Jaruco (a unos 40 kilómetros al este de La Habana) donde, según Bogatyr, "se muestran buenos resultados y donde están creadas todas las condiciones para seguir trabajando y ampliando los trabajos de levantamiento y recuperación asistida".
A su vez, se conversó de la necesidad de incrementar los suministros a Cuba de fertilizantes para la agricultura, metales, trigo, entre otros renglones, donde Rusia expresó su disposición de ayudar.
"Pero no solamente estamos dispuestos a vender productos a Cuba, también estamos dispuestos a comprar productos cubanos, lo que dará algún balance a los intereses de ambas naciones", subrayó el funcionario comercial.
También se mantendrá el desarrollo de la cooperación en el tema de los productos farmacéuticos, un renglón donde Cuba es fuerte y está presente en el mercado ruso, y donde hay buenas perspectivas.
Empresarios
Junto con la delegación oficial estuvo presente un pequeño grupo de empresarios rusos que no fue más numeroso y representativo a consecuencia de las limitaciones sanitarias por el COVID-19, quienes mantuvieron contactos con sus homólogos cubanos.
"El interés de otros empresarios en Rusia de venir a Cuba es alto, continuar los contactos presenciales con sus pares en la isla, y aunque en estos momentos se trabaja a través de video-conferencias y otras formas de comunicación, eso no sustituye los contactos directos, algo vital en los negocios", enfatizó Bogatir.
Agregó que "en cuanto mejore la situación epidemiológica en el mundo, en Cuba y Rusia en particular, estos intercambios empresariales se va a recuperar".
"Veo muchas y buenas perspectivas en el desarrollo de nuestras relaciones económicas y comerciales, y poco a poco se irán restableciendo los volúmenes que tuvimos", pronosticó el representante comercial ruso.
Durante su estancia en la isla al frente de la delegación de su país a la XVIII sesión de la Comisión Intergubernamental, el viceprimer ministro ruso, Yuri Borísov, ratificó que Cuba es un "socio clave" en la región de América Latina, y reconoció el carácter estratégico de las relaciones entre la Habana y Moscú, basadas en principios de amistad y respeto.