Esta manada de felinos tuvo la oportunidad perfecta de atraparlo gracias a que un leopardo, conocido en la reserva como Morwa, estaba merodeando la zona. Los jóvenes antílopes estaban muy preocupados por el temido Morwa como para percatarse de los leones.
Cuando se dieron cuenta, ya era muy tarde: rápidamente los leones clavaron sus garras en uno de los ñu. El momento fue capturado por el guía Rodney Nombekana, que se encontraba de safari en la reserva de fauna Pilanesberg, en Sudáfrica.
Sin embargo, el instinto de supervivencia fue más grande que el miedo. El joven antílope logró escapar al menos por unos segundos hasta que de nuevo fue sometido por el grupo de leones. A pesar de la fuerza de los felinos, llegó a intentar escapar por segunda vez, pero las graves heridas no lo dejaron ir muy lejos.