Un avión de combate MiG-31 salió de un aeródromo del territorio de Kamchatka para escoltar a un avión extranjero. Después de que la nave estadounidense cambiara el rumbo y se alejara de la frontera rusa, el caza regresó a su aeródromo de origen.
El vuelo del MiG-31 se llevó a cabo con respeto de las normas internacionales y no hubo ninguna violación de la frontera, subrayó el organismo.
Los cazas MiG-31 fueron creados originalmente para las misiones de interceptación aérea y escolta táctica, señaló a Sputnik el experto militar Yuri Knutov, director del Museo de Tropas de Defensa Aérea.
"Este modelo tiene una velocidad muy alta, si es necesario, es capaz de alcanzar cualquier objetivo. Tiene una potente mira y un armamento de misiles muy serio", explicó.
Agregó que otros países saben de estas características de la nave y "prefieren no meterse".
"Por eso con bastante frecuencia los MiG-31 vuelan para escoltar aviones espía, y a veces bombarderos que aparecen cerca de nuestras fronteras", comentó Yuri Knutov.