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Semana laboral de cuatro días: pros y contras

El mundo estaría a las puertas de una revolución en lo que se refiere a la semana laboral tradicional de 40 horas, avanzándose hacia una semana laboral de cuatro días. Las autoridades españolas, por ejemplo, aceptaron lanzar un modesto proyecto piloto para empresas interesadas en llevar a cabo esta práctica.
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Estas medidas, no obstante, "tienen que estar bien testadas y tienen que estar acompañadas del aumento claro de la productividad", subrayó en conversación con Radio Sputnik el empresario español Pedro Mouriño, presidente de Iberatlantic Global Corporation.
El también autor de un profundo artículo sobre esta cuestión para la prestigiosa fundación rusa Roscongress, Mouriño coincidió en que "los conceptos clásicos de las relaciones laborales están ahora mismo en reformulación", algo que da pie a "iniciativas o propuestas como la semana laboral de cuatro días".
Un proceso que tiene que ver con "la digitalización, la introducción de procesos productivos cada día más robotizados".
"De allí que se introducen estas ideas, pero también tenemos que, a su vez, matizar o acompañarlas con un concepto muy importante, que es la productividad. Si aumentamos la productividad, es posible reducir el número de horas laborales", resaltó Mouriño.
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