Fue así como este conductor decidió entregar los controles de la locomotora a una persona no calificada para ir rápidamente al cuarto de baño, comunicó la compañía Central Japan Railway.
De haber sucedido este escenario en otro país, probablemente nadie lo hubiese notado. Desafortunadamente para el protagonista de la historia, Japón es una nación conocida por su puntualidad, por lo que el minuto de retraso causado por el urgente llamado a la naturaleza del conductor dio motivos para iniciar una investigación.
El maquinista de 36 años confesó que un fuerte dolor abdominal fue el responsable de que entregara los controles del tren a otro conductor, pero sin licencia, para así poder ir al baño más rápido. En total, estuvo ausente durante tres minutos en la ruta entre la estación de Atami y Mishima.
Sin embargo, no hay que ser físicos para saber que tan solo un minuto de distracción a 150 km, velocidad a la que iba el tren, es suficiente para causar un accidente de gran magnitud.
A pesar de que estos trenes están estrictamente controlados por sistemas de comando central computarizado, los conductores deben permanecer en el lugar para poder manejar cualquier situación inesperada.
12 de abril 2021, 04:19 GMT