"Tenemos cincuenta años de experiencia en colaboración energética confiable, primero entre Alemania y la Unión Soviética, luego entre Alemania y la Federación de Rusia, y esta confiabilidad, así como el interés, siempre han sido mutuos", dijo en el marco del Foro Económico Internacional de San Petersburgo (SPIEF).
En cuanto al proyecto Nord Stream 2, el embajador señaló que la posición de Berlín no ha cambiado.
"Nuestra posición de principio es clara y no cambiará: estamos convencidos de que la seguridad energética de Europa, así como la política energética europea deben ser determinadas por los europeos, y no por alguien desde fuera", indicó.
Al referirse a las sanciones impuestas al proyecto, Von Geyr subrayó que esa medida "contradice el derecho internacional".
Nord Stream 2 es un proyecto conjunto de la compañía energética rusa Gazprom y cinco socios europeos.
Su objetivo es la puesta en marcha de un gasoducto que transportaría hasta 55.000 millones de metros cúbicos de gas natural por año desde Rusia a Alemania, pasando por las aguas territoriales o las zonas económicas exclusivas de Dinamarca, Finlandia, Alemania, Rusia y Suecia.
El proyecto ha sido objeto constante de críticas y sanciones por parte de Estados Unidos, que lo considera una amenaza para la seguridad energética de Europa y una herramienta geopolítica para debilitar a Ucrania, mientras que Rusia afirma que se trata de una apuesta meramente comercial.
La 24 edición del SPIEF se desarrolla del 2 al 5 de junio en el recinto ferial Expoforum, al sur de San Petersburgo.
La agencia Rossiya Segodnya, casa matriz de Sputnik, es el socio mediático del evento.