"Vamos a disputar las previas, respetando a todos los candidatos, pero vamos a trabajar para vencer, y sumar fuerzas con todos para fortalecer la candidatura del PSDB, y ayudar a Brasil", señaló el gobernador al diario Folha de Sao Paulo.
El PSDB, principal partido de la derecha moderada brasileña, celebrará elecciones previas para elegir a su candidato presidencial el próximo 21 de noviembre.
En esas previas, Doria se enfrentará a otros precandidatos menos conocidos, como el gobernador de Rio Grande do Sul, Eduardo Leite; el senador Tasso Jereissati o el exalcalde de Manaos Arthur Virgilio.
De aquí a noviembre podrían surgir otros posibles candidatos, y es que el nombre de Doria no genera unanimidad dentro del partido, y suscita varias brechas internas.
La candidatura presidencial del hasta hace pocos años empresario Doria se esperaba desde que en 2016 se hizo con la alcaldía de Sao Paulo, cuando derrotó a Fernando Haddad (Partido de los Trabajadores).
Duró poco como alcalde, apenas dos años, ya que en 2018 dio el salto a gobernador, en una campaña marcada por su asociación al presidente Jair Bolsonaro, que entonces contaba con un fuerte tirón electoral.
Sin embargo, esa alianza duró poco y pronto Doria se convirtió en uno de los principales rivales políticos del presidente.
En los últimos meses, Doria intentó ganar popularidad a nivel nacional siendo el principal responsable de la vacunación contra el COVID-19 en Brasil, gracias a su temprano acuerdo con el laboratorio chino Sinovac.
No obstante, las encuestas de opinión no demuestran que haya capitalizado ese éxito, y surgen otros nombre en el campo del centro-derecha que podrían presentarse como una alternativa a la polarización entre Bolsonaro y el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2011), los candidatos más claros para los comicios de 2022.