Millones de estadounidenses terminan los festejos por el Día de la Independencia con el espectáculo de luz y color que se lleva a cabo por 45 vez.
El evento vuelve a celebrarse tradicionalmente atrayendo a numerosos espectadores.
Los fuegos artificiales de este año están dedicados a homenajear a los héroes cotidianos de EEUU y a las comunidades de todo el país en medio de la pandemia.