Samuel Luiz Muñiz falleció luego de recibir una brutal paliza a manos de una docena de personas cuando salió de un pub acompañado de su amiga para fumar y hacer una videollamada.
Primero, recibieron amenazas verbales de una pareja que cruzó frente a su cámara y gritó que los dejaran de grabar. Entonces, Samuel recibió el primer golpe y se perdió la imagen de la videollamada, pero en el audio se escuchaba la paliza que le propinaban mientras alguien lo insultaba por su orientación sexual.
La agresión y el asesinato causaron una ola de indignación en toda España.
La policía interrogó a varios sospechosos de haber participado en la paliza, pero hasta el momento no se dio con los culpables.