"Lituania se ha convertido en el blanco de una guerra híbrida del régimen de [presidente de Bielorrusia, Alexandr] Lukashenko que usa migrantes irregulares para trasladarlos a la frontera", afirmó Simonyte en una reunión con el primer ministro de Ucrania, Denís Shmigal.
Añadió que las acciones de Bielorrusia representan "amenazas comunes para la seguridad de la región".
A su vez, el portavoz del comité estatal de fronteras de Bielorrusia, Antón Buchkovski, afirmó a Sputnik que las declaraciones de algunos políticos en Lituania de que los servicios bielorrusos estarían vinculados a la inmigración ilegal en los países de la UE no tienen fundamento y son "fantasías".
Desde principios del año, Lituania ha detenido a más de 1.500 migrantes irregulares procedentes del territorio bielorruso, una cifra 18 veces mayor que la registrada en los 12 meses del año pasado.
El 2 de julio Lituania declaró una emergencia debido al aumento de la inmigración irregular desde Bielorrusia.
A su vez, el presidente bielorruso, Alexandr Lukashenko, aseguró que su país ya no disuadirá a los migrantes irregulares que quieran irse a los países de la UE, ya que, debido a las sanciones occidentales, Minsk no tiene "ni fondos ni fuerza" para ello.