Salcedo vive una vida plena y feliz: estudia periodismo, sale con los amigos y familiares, baila, nada y hace ejercicio.
"No es algo superficial, es algo que… Simplemente estoy aquí y quiero tener esa voz que ayude a los demás, a la comunidad, a los jóvenes, a los adultos, para que cambien esos conceptos", declara.
Victoria está agradecida por tener a su lado a sus seres queridos. La respetan y la aman.
Para ella, participar en el concurso de belleza nacional es una oportunidad de "tener una voz que ayude a la comunidad" y apoyar a otras personas con discapacidad.