In-fa, cuyo nombre significa fuegos artificiales, tocó tierra en la ciudad de Zhoushan, provincia de Zhejiang, a las 12:30 hora local (GMT+89), con una velocidad máxima del viento superior a los 136 kilómetros por hora.
La CMA elevó la alerta de amarillo a ámbar, el segundo grado más alto, y recomendó a los habitantes de las provincias de Jiangsu y Zhejiang y Shanghái que mantengan la vigilancia debido a los vientos y las precipitaciones.
Se cancelaron todos los vuelos hacia y desde Shanghái, Hangzhou y Ningbo, así como algunos servicios ferroviarios.
Según las previsiones, el tifón descargará entre 250 y 360 litros de lluvia en las provincias de Zhejiang y Anhui el 25 y el 26 de julio.
La semana pasada, al menos 58 personas murieron a causa de las inundaciones provocadas por lluvias torrenciales en la provincia china de Henan.