Desde que se alejaron de sus cargos en la realeza británica, Harry y Meghan no pueden representar a la familia real en compromisos oficiales. Tampoco pueden usar la palabra "real" en su marca personal. Sin embargo, la pareja todavía posee sus títulos de duque y duquesa de Sussex, mientras que Harry conserva su título de príncipe.
Sin embargo, el reciente aumento de las tensiones entre la pareja de Sussex y los otros miembros de la familia real británica, causado parcialmente por una entrevista explosiva que Harry y Meghan concedieron a Oprah Winfrey, ha dado fuerza a los rumores de que Isabel II podría remover los títulos de la realeza que todavía mantienen.
Para Ingrid Seward, conocida experta en la realeza británica, dejar a Harry y Meghan sin sus títulos a esta altura ya "no haría una gran diferencia". Además, la acción probablemente sería vista como una decisión "muy mezquina" por parte de la monarca.
"Tampoco creo que sea algo que la reina quisiera hacer en esta etapa de su reinado. Sería mucho más insultante simplemente ignorarlos", dijo Seward a The Express.
La experta considera que incluso pese a las diferencias, el duque y la duquesa deben ser invitados a las celebraciones del jubileo de platino de Isabel II, cuando se conmemorará el 70 aniversario de la llegada de la reina al trono británico.
"Incluso excluirlos del jubileo del próximo año les da munición para criticar a la monarquía", concluyó Seward.
En enero pasado, la reina británica despojó a Meghan y Harry de sus títulos de "su alteza real" después de que la pareja cortara oficialmente los lazos con la monarquía.