Durante mucho tiempo, este pez fue un misterio para los científicos debido a lo pronunciado que es el dimorfismo sexual en esta especie.
Inicialmente parecen una anguila, pero a medida que maduran, los machos crecen con narices largas e hígados grandes, mientras que las hembras se vuelven un poco como ballenas.
Solo en 2003, los científicos pudieron demostrar que el macho y la hembra pertenecen a la misma especie de animal.
Se puede encontrar este animal muy raramente: durante 34 años de observaciones, esta especie fue avistada solo 18 veces.