"Está bastante bien documentado que los talibanes y el ISIS-K [Estado Islámico del Gran Jorasán, rama de Daesh] luchan entre sí, así que no preveo una relación simbiótica allí, aunque estos son escenarios dinámicos, por lo que tendremos que ver cómo evoluciona", dijo el funcionario en una rueda de prensa.
Además, Sullivan declaró que una buena cantidad de armas estadounidenses entregadas a las fuerzas armadas afganas cayó en manos de los talibanes en su avanzada para retomar el poder, y es poco probable que sean devueltas
"No tenemos una idea completa, obviamente, de dónde ha ido cada artículo de material de defensa, pero ciertamente una buena cantidad ha caído en manos de los talibanes y, obviamente, no tenemos la sensación de que nos las van a entregar fácilmente en el aeropuerto", señaló en conferencia de prensa.
En dos décadas de guerra, EEUU invirtió cientos de millones de dólares en armamento para dejar a las fuerzas militares locales cuando se retirara del país, pero no previó una caída del poder tan rápida, dijeron las autoridades el lunes.
El domingo, los combatientes del movimiento talibán entraron en Kabul, precipitando la caída del Gobierno del presidente Ashraf Ghani que tenía el apoyo de la Casa Blanca.
Tras la toma de la capital, el portavoz del grupo insurgente, Mohammad Naeem, aseguró que la guerra había acabado.