Según comunicó el cuerpo policial español, se trata de "un peligroso Ladrón en Ley buscado por las autoridades rusas al fugarse de un juzgado en ese país cuando se enfrentaba a quince años de prisión".
El ciudadano ruso fue interceptado por las autoridades cuando trataba de entrar en España por el aeropuerto de El Prat de Llobregat (Barcelona) utilizando un pasaporte falso de Ucrania.
La Policía española explicó que el presunto criminal "está catalogado como un violento e influyente Ladrón en Ley", término que se refiere al máximo nivel del crimen organizado ruso, desde que fue nombrado en esta categoría en 2006.
En la investigación colaboró la Policía de Georgia, que ayudó a comprobar que el investigado tenía la intención de seguir dirigiendo su organización en España de manera anónima.
Los agentes españoles "constataron tales extremos y procedieron a su detención a su llegada a España", donde trató de acceder con documentación falsa.
El fugitivo era buscado por las autoridades rusas desde que el año pasado había protagonizado una "sorprendente" huida de un juzgado de Rusia, según la Policía española.
Allí iba a ser enjuiciado y se enfrentaba a una pena de prisión de hasta quince años, por lo que desde entonces permanecía en la clandestinidad.