El cohete explotó unos 2,5 minutos después del lanzamiento efectuado desde la base aérea Vandenberg, en California, a las 18:59 hora local del 2 de agosto (2:59 GMT), según el portal Spaceflight Now.
"Durante el ascenso de la primera etapa, el Alpha experimentó una anomalía que derivó en la pérdida del vehículo. A medida que recopilemos más información, se proporcionarán detalles adicionales", publicó la compañía en Twitter.
Antes de empezar la cuenta atrás, agregó la empresa, la rampa del lanzamiento y las áreas circundantes habían sido despejadas para minimizar el riesgo para el personal.
Con sede en Austin, estado de Texac, Firefly Aerospace desarrolla lanzadores para elevar a órbitas bajas las carga útiles de 1.000 a 10.000 kilogramos a un precio inicial de 15 millones de dólares.