"La subsistencia y el futuro de la industria del banano, de la cual dependen de manera directa más de 808.000 familias en Latinoamérica", requiere que los sobrecostos "no sean soportados únicamente por los países productores-exportadores (...), sino que se involucre a toda la cadena de valor", señalaron los bananeros de esos países en un comunicado conjunto.
Según el comunicado, "es necesario que, en el marco del concepto de la responsabilidad compartida, sean discutidos estos aspectos cruciales para asegurar el compromiso de todos los actores con la sostenibilidad de la industria bananera global", ya que los países productores-exportadores asumen todos los cuidados de las plantaciones y otras responsabilidades durante un periodo extenso.
El llamado obedece al incremento de entre 35 y 45% en los precios de los fertilizantes, del cartón y del plástico para el transporte de la fruta (de 30 y 45%, respectivamente), y por el incremento generalizado del costo de fletes marítimos en hasta un 62% debido de la escasez mundial de contenedores.
Asimismo, advirtieron de "la pérdida de producción generada por los nuevos límites máximos de residuos de los mercados de destino, que inobservan las necesidades y la realidad de la producción de la región", la aplicación de estándares impuestos por un mercado "sobre certificado", y la adopción de medidas de bioseguridad para prevenir el hongo Fosarium Raza 4, que se traduce en el mayores costos para la sostenibilidad de la industria.
"Estos costos impactan directa y negativamente sobre la sostenibilidad económica y competitividad de la industria bananera, que ha sufrido incalculables daños por el ascendente acontecer de fenómenos naturales en la región y no ha sido ajena a los efectos de la pandemia de COVID-19", indicaron en el comunicado.
Por último indicaron que debido a tales sobrecostos, el precio del banano ha sufrido en 2021 el decrecimiento más fuerte de los últimos 10 años, llegando a 10 euros por cada 18,5 kilos.
Los productores y exportadores de banano añaden que mientras los precios cayeron se vieron afectados en este año por el alza de costos de insumos como fertilizantes, cartón, plástico, así como por la pérdida de producción generada por los nuevos límites máximos de residuos de los mercados de destino.
A eso se suma, afirman, la aplicación de los estándares impuestos por un mercado sobre certificado, la adopción de medidas de bioseguridad para prevenir el hongo FOC R4T, la implementación de medidas de seguridad para evitar la contaminación de contenedores con sustancias ilícitas y, también el incremento generalizado del costo de fletes marítimos, hasta un 62%, debido de la escasez mundial de contenedores, entre otros.
"Estos costos impactan directa y negativamente sobre la sostenibilidad económica y competitividad de la industria bananera, que ha sufrido incalculables daños por (…) fenómenos naturales en la región y no ha sido ajena a los efectos de la pandemia del COVID-19", dice el comunicado.