La ONU, agregó, reafirma su compromiso de "trabajar juntos para defender sus derechos y necesidades".
A su vez, el Ministerio de Exteriores del Reino Unidos rindió homenaje a las víctimas del atentado terrorista.
"Hoy recordamos a todos aquellos que perdieron la vida durante los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001. Nunca olvidaremos a los que murieron ese día y a todos los que se pusieron en peligro para ayudar a los demás", publicó en ente en su cuenta de Twitter.
Por su parte la reina Isabel II del Reino Unido expresó la solidaridad con las víctimas de los atentados terroristas.
"En el aniversario de los terribles atentados del 11 de septiembre de 2001, mis pensamientos y oraciones, y de mi familia y toda la nación, están con las víctimas, con los sobrevivientes y con las familias de las víctimas, así como con los primeros rescatistas movilizados", dijo la reina en un mensaje al presidente estadounidense, Joe Biden.
El presidente de Colombia, Iván Duque, se sumó al vigésimo aniversario luctuoso de los atentados.
"Hace 20 años el mundo se estremeció con un acto demencial de terrorismo sin precedentes. Miles de personas fallecieron y la humanidad entendió que el terrorismo es la peor forma de degradación y corrupción humana", escribió Duque en su cuenta de Twitter.
"Hoy expresamos nuestra solidaridad a todas las familias que lloran a sus seres queridos fallecidos el 11 de septiembre del 2001. Reiteramos que el mundo debe seguir enfrentando sin vacilaciones y con determinación cualquier forma de terrorismo", agregó.
El 11 de septiembre de 2001, terroristas del
grupo Al Qaeda secuestraron cuatro aviones de pasajeros, estrellando dos de ellos contra el complejo de edificios World Trade Center, de Nueva York, y otro en el Pentágono.
La otra aeronave, que tenía como destino el Capitolio, en la ciudad de Washington, se estrelló a unos 200 kilómetros de su objetivo, presuntamente después de que los pilotos perdieran el control tras un enfrentamiento entre los atacantes y algunos pasajeros y tripulantes del avión.
Unas 3.000 personas de 90 países perdieron la vida en los ataques.