De acuerdo con el medio de comunicación, "una operación normal de control del territorio hecha por la policía en Nápoles llevó al arresto de un narcotraficante colombiano [refiriéndose presuntamente al exfutbolista], destinatario de una orden de captura por tráfico de drogas y producción de sustancias estupefacientes, emitida por la magistratura italiana en diciembre del 2004".
Antony de Ávila, exjugador del América de Cali y de la Selección Colombia en el Mundial Francia-98, se encontraba en calles napolitanas en el momento de la detención.
En las eliminatorias a ese campeonato del mundo, De Ávila había dedicado un gol a los jefes del Cartel de Cali, los hermanos Gilberto y Miguel Rodríguez Orejuela, ya presos para entonces.