El ejemplar marino medía unos 2,90 metros de longitud y 3,20 metros de distancia entre las aletas. Si bien el pez tenía un peso de 1.000 kilos, los expertos consideran que esta especie puede alcanzar un peso mayor.
Para analizar al pez, los investigadores necesitaron dos grúas instaladas en barcos para levantarlo. El ejemplar fue capturado el 4 de octubre y tras haber tomado muestras de su ADN lo devolvieron al agua.
La pesca de esta especie está prohibida, pero su captura momentánea aporta a la investigación de la población de peces luna que pasan por Ceuta para diferenciar con precisión morfológica y genéticamente entre las especies Mola mola y Mola alexandrini que dirigen los investigadores de Estación de Biología Marina del Estrecho de la Universidad de Sevilla.