Las fuentes recogidas por el medio catarí Al-Araby Al-Jadeed, acusaron a Abás de "jugar un papel destructivo", ya que busca obstaculizar los esfuerzos de mediación de Egipto, porque se opone a la inclusión en la lista del líder de Al Fatah encarcelado, Marwan Barghouti, que Hamás quiere que sea liberado de una prisión israelí.
Barghouti, de 62 años, fue arrestado por el Ejército israelí en 2002 debido a su participación en las actividades terroristas durante la segunda Intifada.
Abás cree que la decisión de Hamas de incluir a Barghouti y otros reclusos prominentes "apunta principalmente a avergonzarlo y mostrar que es negligente con el problema de los prisioneros y los esfuerzos para liberarlos", señalaron las fuentes.
"Los temores de Abás han aumentado al darse cuenta de que Barghouti es un fuerte rival", indicaron los interlocutores del medio.
Las fuentes egipcias también afirmaron que Abás "presionó a más de una de las partes, incluido Egipto, para llegar a un acuerdo sobre algunos arreglos internos y asuntos relacionados con su permanencia en su puesto al frente de la ANP por un período indefinido" antes de iniciar las negociaciones.
Un alto funcionario palestino en Ramala negó el informe y lo calificó de "mentiras difundidas por los enemigos de los palestinos", según el mismo medio.