La iniciativa partió de la Interprofesional del Porcino de Capa Blanca (Interporc) y se llevó a cabo en varias ciudades de España. Se instalaron carpas y se invitaba a los ciudadanos a que realizaran cerditos de origami para conseguir batir este récord Guinness en la categoría de manualidades.
La acción comenzó el octubre de 2019 pero la pandemia hizo que tuvieran que paralizarla. Finalmente, y gracias a la colaboración de todos los que participaron en este reto, consiguieron reunir los 3.000 cerditos de papel y superar así a la ciudad japonesa de Sannai-Maruyama que tenía el récord desde septiembre de 2018 con un mural con 2.160 figuras.
Al mismo tiempo, la iniciativa ha servido para dar visibilidad al sector porcino de capa blanca español, que según Interporc "es motor de la economía y el empleo de miles de pueblos de toda la geografía española, y genera más de 400.000 empleos, que contribuyen al desarrollo económico y social de buena parte de las zonas rurales".
La entrega del premio se ha realizado el 20 de octubre después de que un juez de la organización del Guinness World Records analizara y comprobara el gran mural formado por 3.000 cerditos de papel.