En los últimos días crecieron los rumores sobre esa posible candidatura, y el 12 de noviembre, en un evento, Alckmin no lo descartó, diciendo que Lula es una opción porque tiene "aprecio por la democracia" y que la decisión no tiene que tomarse "ya", según recoge el diario Folha de Sao Paulo.
Alckmin fue el principal candidato de la derecha en las elecciones de 2006, cuando Lula fue elegido para su segundo mandato.
Tras centrarse en el Gobierno de Sao Paulo, en 2018 volvió a concurrir como candidato presidencial del PSDB, pero el espacio de la derecha moderada fue superado por la extrema derecha del ahora mandatario Jair Bolsonaro.
Luego de su derrota electoral y el ascenso del actual gobernador de Sao Paulo, Joao Doria, Alckmin, más moderado, quedó arrinconado y ahora pretende dejar el partido, posiblemente afiliándose al Partido Socialista de Brasil (centro-izquierda) o al Partido Social Democrático (PSD), de centro.
La mayoría de analistas políticos ve la posible candidatura Lula-Alckmin como una buena estrategia del líder del Partido de los Trabajadores (PT) de presentarse como una opción moderada y de centro frente a Bolsonaro, para conquistar a los electores indecisos.
Además, un segundo efecto podría ser poner el Gobierno del estado de Sao Paulo en manos de la izquierda, lo que supondría un vuelco histórico.
De momento, Alckmin también suena como posible candidato a gobernador de Sao Paulo y aparece líder en las encuestas, pero si salta al plano nacional el principal beneficiado sería el segundo colocado, el exministro del PT Fernando Haddad.